El presidente uruguayo, José Mujica, dijo que endurecerá las penas por la producción ilegal de marihuana.
El mandatario de Uruguay, José Mujica, sostuvo este martes que si el consumo de marihuana se descontrola en el país tras la legalización de la producción y la distribución, su gobierno está dispuesto a dar marcha atrás.
"Este es un experimento", aseguró en una entrevista con la agencia de noticias AFP."Como todo experimento, naturalmente tiene riesgo y tenemos que tener la inteligencia de que si nos supera y nos pasa por arriba, ponemos la marcha atrás", agregó.
"Nosotros a la comunidad internacional le tenemos que pedir que nos ayude", afirmó Mujica, que admitió que los países vecinos Argentina y Brasil "deben de tener preocupación" por el proyecto uruguayo. "Pero también nos van a ver con avidez", defendió.
Mujica enfatizó que el objetivo no es una liberalización total del cannabis, sino que sea controlado por el Estado. También destacó que el Gobierno planea endurecer las penas de prisión para quienes cultiven marihuana sin estar registrados.
El proyecto impulsado por el Frente Amplio para regular la producción, la distribución y el consumo de marihuana obtuvo media sanción la semana pasada en la Cámara de Diputados. En octubre, será tratado en el Senado.
Este lunes, el mandatario indicó que, de ser necesario, convocará a una consulta popular para ratificar la vigencia de legislación cuando sea sancionada. La oposición ya había dicho que usaría esa herramienta si la iniciativa se convertía en ley.