El fiscal Gonzalo Valderas solicitó que José Fuentes Paduro y Jorge Álvarez Cuell sean condenados a un total de 13 años de presidio por causar la muerte a un hombre y dejar a otro con lesiones graves, tras dispararles en agosto de 2002 en el exterior de un local ubicado en calle Camilo Henríquez.
Esta mañana se inició un juicio oral en el Tribunal Oral en lo Penal de Valdivia contra dos hombres acusados por la Fiscalía de esta ciudad por los delitos de homicidio simple y lesiones graves.
El fiscal Gonzalo Valderas Aguayo, quien investigó este caso y decidió llevar a juicio a los imputados, explicó que José Patricio Fuentes Paduro (28) y Jorge Enrique Álvarez Cuell (24) son responsables de estos delitos, los que perpetraron el 2 de agosto de 2012 afuera de un restaurante ubicado en la calle Camilo Henríquez de esta ciudad.
“Alrededor de la 1:15 horas, los acusados salieron desde el interior del restaurante Zi-po premunidos de armas de fuego, con las que efectuaron disparos en contra de dos personas, resultando Emerson González Cumicán con una herida toráxica por arma de fuego que le causó la muerte momentos más tarde, en tanto que un amigo de éste recibió un disparo que le provocó una lesión de carácter grave”, precisó el fiscal Valderas.
El fiscal solicitó al tribunal que Fuentes Paduro y Álvarez Cuell sean condenados por el delito de homicidio simple a cumplir una pena de 10 años de presidio, en tanto que por el delito de lesiones graves pidió que se les condene a 3 años de presidio.
Para acreditar la participación de ambos acusados en los delitos mencionados, el fiscal Gonzalo Valderas presentará durante el juicio la declaración de testigos –entre ellos, el de un hermano del fallecido y el de la víctima que resultó herida de gravedad-, junto con pruebas periciales y documentales.
PORTE ILEGAL DE ARMA DE FUEGO
Además, el fiscal Gonzalo Valderas solicitó al tribunal que condene a Jorge Álvarez Cuell a cumplir una pena de 3 años de presidio por el delito de porte ilegal de arma de fuego y municiones, debido a que el 10 de agosto de 2012 fue detenido en una discotheque con una pistola marca Jericho, calibre 9 milímetros, y 10 proyectiles balísticos, sin tener la debida autorización para su porte ni tenencia.
Nº Edición 194