El revuelo luego de la denuncia del diputado Fidel Espinoza provocó la reacción de diferentes sectores de la sociedad ganadera. Mientras Espinoza acusa al SAG de ineficiencia, la SAGO señaló que se hace un daño a la imagen del sector lechero.
Las fuertes imágenes de la denuncia realizada por el diputad Fidel Espinoza provocaron airadas reacciones de protestas por la crueldad que dejaban a vista de la sociedad una práctica que, lamentablemente, es más común de lo que se quisiera, con una matanza anual cercana a los 5 mil terneros, mientras que la SAGO estima que en la economía de la provincia de Osorno dejan de circular unos 2 mil millones de pesos al año.
Si bien la eutanasia es un proceso que está avalado por la normativa nacional e internacional, en el bien entendido que ésta se aplique respetando el bienestar animal y en circunstancias bien específicas, la denuncia del diputado apunta a que es un práctica repetitiva y constante en la Hacienda Coihueco de Puerto Octay.
Espinoza señaló a Lo Que Queda del Día de Radio Cooperativa que la empresa neozelandesa Manuka con el fin de que las crías no consuman la leche que se produce, ésta obligó a sus trabajadores a matar a miles de terneros en cada temporada: "No estamos hablando de eutanasia, estamos hablando de una matanza de animales porque los dejan morir de hambre en los establos".
Además, el diputado acusó al Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de ineficiencia, luego que el organismo declarara -mediante un comunicado- que no se detectó maltrato animal, explicando se fiscalizó, detectaron algunas irregularidades, se inició un proceso sancionatorio y que se multó a la empresa con 25 UTM. Ante esto, Espinoza manifestó que "en Chile se denominaría esa declaración del SAG como 'tratar de embolinar la perdiz' (…) No dicen en ninguna parte las denuncias que como diputado fiscalizador cumplí en la Cámara, ellos tienen pleno conocimiento de las denuncias que yo hice, porque ellos saben que no hice nada. Desconozco el por qué, yo creo que es falta de eficiencia. Sí, hay ineficiencia", criticó.
La empresa acusada, Manuka, se defendió de la acusación con un comunicado en el que señalan:
que rechazan "tajantemente el maltrato de animales. La industria láctea depende del manejo adecuado del ganado, por tanto cualquier estrés que se genere a los animales productivos, atenta contra nuestra actividad".
"La legislación establece que todos los productores cuenten con fosas bajo condiciones reglamentadas. Asimismo, dentro del modelo de producción lechera, la práctica de eutanasia está debidamente regulada por la autoridad, en particular por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG)".
"En la actualidad, no existe un mercado para la venta de determinadas razas enfocadas a la industria láctea, y no de carne. Pese a esto, los productores de leche –entre los que se encuentra nuestra empresa- se esfuerzan por venderlos a un precio simbólico. Es decir, la eutanasia es el último recurso".
"En 2013 el SAG indicó observaciones a algunos procedimientos, ninguno de ellos referente a maltrato animal. En septiembre de ese mismo año, todas las fallas detectadas por la autoridad fueron debidamente subsanadas, lo cual fue certificado por el SAG".
La Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno (SAGO), a través de su Gerente Técnico, José Antonio Alcázar, aclaró que el proceso de eutanasia, es un proceso que está avalado por la normativa nacional e internacional, en el bien entendido que ésta se aplique respetando el bienestar animal y en circunstancias bien específicas.
Sin embargo, José Antonio indicó que SAGO no comparte esta práctica de Manuka, tomando en cuenta que existen diversas formas de otorgar un mejor destino a los animales, por ejemplo entregándoselos productores de la zona, lográndose con ello mejorar la calidad de vida de estos y a su vez evitar el enorme daño a la imagen del sector lechero nacional.
Finalmente el gerente Técnico de SAGO, José Antonio Alcázar, manifestó que ante este hecho las autoridades tienen un rol fundamental como mediador en la solución del problema, recordando que en reiteradas ocasiones, tanto SAGO como otros organismos gremiales han planteado a los distintos Gobiernos propuestas que van en el sentido de dar un destino productivo a los terneros de lechería.
Esta situación suma un problema más a un sector ya golpeado durante todo el año 2013 ante la fuerte disputa que han mantenido los productores lácteos locales y nacionales con las multinacionales por el bajo valor que le han asignado el producto, siendo éste uno de los más bajos del mundo, a pesar de ser uno de los de mejor calidad.
elvacanudo.cl / Edición 171